Edición No. 18, Issue I, Julio 2021
1. INTRODUCCIÓN
La planificación y operación de un sistema eléctrico
de potencia se basa en diferentes tipos de estudios
relacionados con simulaciones del comportamiento en
estado estacionario y dinámico. El comportamiento real
del sistema es estimado mediante el uso de simulaciones
basadas en software. En este contexto, la disponibilidad
de modelos adecuados de cada uno de los componentes
del sistema garantiza simulaciones lo suficientemente
precisas y, en consecuencia, decisiones acertadas con
relación a acciones de control. Los diversos componentes
físicos del sistema de potencia (entre ellos las centrales
de generación), así como sus sistemas de control, deben
modelarse adecuadamente, con suficiente detalle y
precisión; esto permite representar con exactitud el
comportamiento real del sistema de potencia. Definido el
modelo específico, surge la incógnita ¿es un modelo
válido? Esta interrogante muchas veces tiene una
respuesta negativa, ya que el modelo implementado o
diseñado frecuentemente corresponde a una
representación matemática, cuyos parámetros, en
primera instancia, necesitan ser ajustados o identificados
con base en un proceso de validación.
La validación de los modelos matemáticos de los
diferentes componentes de un sistema eléctrico de
potencia toma un papel fundamental a raíz de dos eventos
suscitados en julio y agosto de 1996 en el sistema
interconectado occidental de Estados Unidos, operado
por el Consejo Coordinador de Electricidad del Oeste
(WECC, por sus siglas en inglés). Estos eventos
derivaron en un disturbio complejo que incluyó colapso
de voltaje, oscilaciones de potencia no amortiguadas y
pérdidas de generación. Cuando los ingenieros de
planificación intentaron reproducir ambos eventos en
simulaciones, no hubo coincidencia entre las
simulaciones y las grabaciones reales de perturbación,
recayendo en la respuesta de que aquello sucedió debido
a que los modelos del sistema eléctrico de potencia no se
encontraban correctamente validados [1] y [2].
Las centrales hidroeléctricas constituyen una parte
importante dentro de un sistema eléctrico y por tanto sus
sistemas de control, tales como el regulador automático
de voltaje (AVR, por sus siglas en inglés), el
estabilizador de sistemas de potencia (PSS, por sus siglas
en inglés) y el regulador de velocidad (governor GOV en
inglés), desempeñan un papel fundamental dentro de la
estabilidad operativa del sistema.
En la actualidad, la Unidad de Negocio CELEP EP
CCS, así como el Operador Nacional de Electricidad
CENACE, poseen los modelos en simulación validados,
únicamente del AVR y PSS de la central [3]. En el caso
del sistema regulador de velocidad – turbina, ambas
entidades se encuentran ante la limitante de poseer un
modelo estructurado y ajustado únicamente con base en
información técnica proporcionada durante el diseño de
la central y no validado de forma correcta. En
consecuencia, no se dispone de un modelo que represente
fielmente la respuesta dinámica del sistema mencionado
y del conjunto total de los esquemas de control de las
unidades de generación, pudiendo de esta forma entregar
resultados erróneos y predicciones equívocas de
simulación ante posibles eventos de variación de
frecuencia o carga y diferentes tipos de fallas en el
sistema que pueden repercutir en decisiones desacertadas
que podrían llegar a tener un gran impacto técnico y
económico tanto en la operación del Sistema Nacional
Interconectado (SNI) como de la central.
Adicionalmente, no existe un estudio público previo, a
nivel nacional, que incluya simulaciones a partir de
registros de Unidades de Medición Fasorial (PMU, por
sus siglas en inglés) que permita estructurar un proceso
de validación para modelos del sistema regulador de
velocidad – turbina, proceso que, según NERC (North
American Electric Reliability Corporation), debe
realizarse de manera periódica.
La técnica de Validación de Modelos de Centrales de
Energía (PPMV Power Plant Model Validation por sus
siglas en inglés) es muy usada en la literatura. Ésta se
basa en perturbaciones de la red registradas por medio de
PMU. Esta propuesta toma como referencia las guías de
confiabilidad de North American Electric Reliability
Corporation (NERC, por sus siglas en inglés) [4], [5], el
estándar MOD-027-1 [6] y la metodología
(PLAYBACK) con la herramienta de simulación descrita
en [2] y [7]. Por otro lado, en [8] se propone una
metodología para identificación de equivalentes
dinámicos usando un novedoso algoritmo de
optimización heurística denominado Mean-variance
Mapping Optimization MVMO y mediciones obtenidas
de PMU. El MVMO es implementado en PowerFactory
a través de programación DPL en [9]. En base a estos
desarrollos, en [3] se presenta la implementación de un
proceso de identificación paramétrica para el modelo
generador - AVR basado en MVMO, el cual es
posteriormente adaptado para implementar en
PowerFactory el proceso de PPMV en [2] y [7]. No
obstante, las aplicaciones hasta ahora implementadas en
PoweFactory se han concentrado en la identificación
paramétrica del modelo generador-AVR de centrales
hidroeléctricas del SNI y no han incluido la identificación
de los parámetros del GOV.
Sobre la base de lo mencionado, el presente trabajo
propone la modelación y validación de los reguladores de
velocidad – turbina de las unidades de generación de la
central hidroeléctrica CCS mediante el uso de
simulaciones basadas en el software DIgSILENT
PowerFactory y a partir de registros obtenidos de eventos
que ocurran en el sistema. Estos modelos permitirán
realizar análisis apropiados en condiciones de régimen
estacionario y dinámico con base en simulaciones que
garanticen resultados consistentes de la central para la
adecuada toma de decisiones técnicas y económicas en
su operación. De igual forma, se propone un protocolo
para la validación del sistema de control en estudio.