Edición No. 21, Issue II, Enero 2025
1. INTRODUCCIÓN
En la actualidad, existe una preocupación por
investigar las posibilidades de uso de las diferentes
fuentes de energías renovables [1]. En ese marco, se ha
empezado a investigar las posibilidades de uso de la
energía solar [2], la energía geotérmica [3] y la energía
eólica; en el caso del Perú, ese interés se ha enfocado en
aquellas regiones del país que cuentan con la presencia
favorable de este tipo de recursos renovables, entre ellas
Moquegua [4]. En los últimos años, también se ha
empezado a evaluar el potencial en energía geotérmica,
considerando los dos volcanes de la región y varias zonas
geotermales (Titire – Puente Bello; Jesús María, Ichuña
y Tolapalca; Calacoa; Ullucán – Omate; Ubinas; y
Crucero) [5].
Esa es una zona geotermal donde las temperaturas
registradas por los geotermómetros la caracterizan como
de media entalpía, con valores que varían entre las
proximidades de los 100°C y los casi 200°C,
dependiendo del lugar específico donde se toma la
muestra [6]. Esto hace que se considere el uso directo
como la forma más apropiada de aprovechar este recurso
[1]. Pero se deja inquietud abierta en torno a la
posibilidad de su uso en la generación de energía
eléctrica, finalidad mayormente asumida en zonas
geotermales de alta entalpía.
Esa preocupación se manifiesta en algunos trabajos
que ubican la posibilidad de aprovechamiento de la
energía geotérmica mediante la puesta en marcha de
centrales geotérmicas de diferente potencia en la región,
como el de Bulnes [7], el de Gamarra [6], o el de Trujillo
y Pérez [8]. Considerando que este interés es
relativamente reciente e incipiente, las zonas en las que
se ha empezado a examinar las posibilidades de
dimensionamiento de una central geotérmica para la
generación de energía eléctrica son todavía sólo las de
Calacoa – Putina [8] y Jesús María [7] por ello e se
seleccionó la zona de Ubinas en la cual no se hizo una
primera estimación de su potencial de generación
geotérmica como se ve en el Anexo 2.
Se entiende la energía geotérmica como la parte o
porción del calor producido por la tierra en forma
continua por el decaimiento de los isótopos radiactivos
de duración extensa, que es susceptible de ser recuperado
y utilizado por el ser humano en los propósitos que
considera convenientes [7]. Así, una zona geotermal es
aquella parte de la litósfera que está sometida a tensiones
que producen presiones intensas y una cantidad grande
de calor, lo que deriva en la aparición de fracturas y fallas
por las cuales tienden a ascender desde el manto diversos
materiales, entre magma, rocas incandescentes, agua o
ácido clorhídrico o sulfhídrico. Y se entiende el ciclo
binario como un tipo de sistema en el cual el agua
geotérmica se hace pasar a través de in intercambiador de
calor, de modo tal que su calor se transfiere a otro líquido
cuyo punto de ebullición es menor que el que caracteriza
al agua; por lo general, ese otro líquido es isobutano o
pentano y, en algunos casos isopentano [8].
En ese marco, se entiende la central geotérmica como
aquel tipo de instalación cuyo propósito es la generación
de energía eléctrica sobre la base del aprovechamiento de
la energía geotérmica, es decir, el calor que se produce en
el interior de la tierra. Y se entiende la media entalpía
como aquella categoría de clasificación de la capacidad
calorífica de un recurso geotérmico que se identifica
cuando la temperatura del recurso se ubica entre los
150°C y los 220°C, mediante el uso de lo que se conoce
como ciclo binario se puede utilizar directamente el
recurso geotérmico para generar energía.
En cuanto al isobutano, conocido también como
metilpropano, se trata de un compuesto de carácter
orgánico que se agrupa dentro de los así llamados alcanos
[9]. Su fórmula es C4H10. En cuanto al isopentano,
también se le conoce por su nombre químico,
metilbutano, e incluso como 2-metilbutano. Se trata
también de un compuesto de carácter orgánico que se
incluye dentro de los alcanos; en este caso, se caracteriza
por su cadena ramificada de cinco átomos de carbono [9].
La fórmula que lo identifica es C5H12. Y en cuanto al n-
pentano, se le conoce comúnmente como pentano. Se
trata también de un hidrocarburo de constitución saturada
(alcano) que, a diferencia de los otros alcanos que se
presentan en estado gaseoso, este lo hace como líquido
considerando la temperatura del ambiente [9]. Estos
fluidos de trabajo determinan la eficiencia de la central
en base a su comportamiento termodinámico ya que su
principal característica es su presión crítica y temperatura
de ebullición son menores a los del agua, tanto el
isobutano, n-pentano y isopentano son fluidos secos es
decir que a la salida de una turbina solo tiene una sola
fase (vapor) por ello son recurrentemente usados en
geotermia [19].
Esta investigación se justifica, primero, desde una
perspectiva teórico científica. Así, se investiga la
posibilidad de analizar una central geotérmica para la
generación de energía eléctrica en base a un ciclo binario
de temperaturas medias, el que normalmente se enfoca en
el uso directo del recurso [10]. Segundo, desde una
perspectiva socioeconómica, este estudio contribuye a
proporcionar información para autoridades del sector
energético y autoridades locales, respecto de la
posibilidad de aprovechamiento de los recursos que se
generan en esta zona geotermal, en beneficio de la
población [11]. Y tercero, desde una perspectiva
ambiental, el planteamiento de uso de recursos
geotermales en reemplazo de los combustibles fósiles,
representa la posibilidad de incorporar una fuente de
energía absolutamente renovable con un muy bajo nivel
de contaminación ambiental, en comparación con sus
equivalentes en base a gas u otros combustibles fósiles
[12].
Finalmente, se plantea como objetivo analizar y
dimensionar una central geotérmica de 10MW de
Potencia usando un Ciclo Binario de Media Entalpia, en
la zona de Ubinas, Moquegua. Por consiguiente, la etapa
a seguir es:A) Determinar la potencia de una central